Dejamos atrás San Carlos, con algo de pena nuestra experiencia allí había sido inolvidable, y seguimos nuestra ruta.
Tras 2 horas de panga (280 córdobas) llegamos al «El Castillo», teníamos contratada una noche de hotel, no teníamos muy claro cuanto tiempo estar, llovía a cantaros cuando llegamos al muelle, la gente del hotel nos recogió y nos fuimos a descansar un poco.
El Castillo esta asociado a la «Reserva Biológica Indio Maíz» y por supuesto a la antigua fortaleza española que da nombre al pueblo, pero ofrece mucho mas que eso.
Tras descansar un poco nos fuimos a buscar algún sitio para comer y encontramos el «Border Coffe», un pequeño local al final del pueblo, fuimos a comer allí varias veces. Charlando un poco con el dueño nos recomendó a Sheila, de «Nenas Lodge», para organizar los tours durante nuestra estancia, fue un acierto.
Border Coffe, junto hotel Victoria, súper rico para comer y cenar, súper atentos los chicos, espaguetis con tomate súper ricos.
Estuvimos un rato con Sheila y nos comento los posibles tours y actividades que estaban disponibles en el castillo:
- Tour Nocturno en barca, 45 $ por los dos, 2 horas.
- Trekking por la reserva de Indio Maíz, 75 $ por los dos, 4 horas.
- Tour en Canoa 30 $ por los dos, 3 horas.
- Tour a Caballo a plantación de cacao y visita planta procesado, 40 $ por los dos, 3 horas.
- Visita por nuestra cuenta a la Fortaleza, 45 córdobas por persona, 25 córdobas por la Cámara.
Lo hicimos todo, alguno como el Tour Nocturno 2 veces 🙂
El primer día empezamos fuerte y nos fuimos con Sheila para hacer el Trekking de Indio Maíz.
La Reserva Biológica Indio Maíz es considerada una de las reservas naturales mejor preservadas en Nicaragua. Ésta se localiza en la esquina sureste del país, bordeando el río San Juan.
La reserva comprende 3180 km² y es el hogar de una amplia variedad de animales de la selva. Entre ellos la habitan cientos de especies de aves, incluyendo tucanes, guacamayas, colibríes y loros. En la zona también habitan mamíferos, tales como venados, perezosos, jabalíes, pumas, jaguares, pacas, zorros e incluso manatíes, además de las tres especies de monos que viven en el país (mona congo, cara blanca y mono araña). Asimismo, se pueden encontrar ranas venenosas, serpientes, cocodrilos, tortugas e iguanas.
Fuimos en barca hasta la entrada de la reserva, ya por el camino pudimos observar lo rica que era la fauna en aquel lugar, estuvimos 3 horas dentro de la reserva. Aunque durante un rato estuvo lloviendo fue un trekking muy interesante, Sheila sabe bien de lo que habla y se nota que es una apasionada de lo que hace.
Vimos un par de perezosos, algunos monos, muchos insectos y aves, algunas iguanas y tortugas y un zorro de cola pelada, una salida muy productiva.
Fue agotador, así que decidimos no hacer nada mas ese día, lo dedicamos a pasear y descansar.
Al día siguiente por la mañana nos fuimos con Alfonso para visitar una plantación de cacao y la planta de procesado, ya escribimos sobre este tour, solo deciros que no podéis pasar por el castillo y no hacerlo, es una de las cosas que mas nos gusto.
Otra de las posibilidades es navegar por uno de los afluentes del rio en canoa, era una canoa para tres, íbamos nosotros dos y un guía. Remontamos el afluente hasta que no pudimos mas, después bajamos y nos vinieron a recoger en una lancha. Durante el trayecto el guía paraba cada vez que había algo de fauna para ver, es un tour divertido y súper relajante.
El tour nocturno lo hicimos 2 veces, uno organizado con Sheila y otra con la gente de Luna del Rio, en ambos disfrutamos mucho, quizás gane el que hicimos con la gente de Luna del Rio ya que vimos un perezoso de 3 dedos, algo difícil de ver. 🙂
Por ultimo queda la fortaleza, no nos podíamos ir sin visitarla, es una visita cultural/histórica que puedes hacer por tu cuenta, esta en el mismo pueblo a pocos minutos andando.
Al entrar a la izquierda encontraras el museo donde se explica la historia del pueblo y de la fortaleza, ademas de varios datos sobre la construcción. Una vez visitado el museo, te puedes dirigir hacia la fortaleza.
Ademas de la visita de la misma, su posición estratégica hace que las vistas sobre el pueblo sean espectaculares.
El Castillo de la Inmaculada Concepción es una fortaleza de la época colonial, ubicada en el departamento de Río San Juan, Nicaragua. Fue construida a finales del siglo XVII sobre las ruinas de una antigua fortaleza de la época del rey Felipe II de España. La elección del lugar se debe a la intervención del ingeniero militar Martín de Andújar Cantos quién había llegado a la zona junto a Fernando Francisco de Escobedo con el fin de realizar una inspección. El motivo de la construcción de la nueva fortaleza era detener las invasiones de los piratas que incursionaban por ese río para saquear la ciudad de Granada. Entre el 29 de julio y el 3 de agosto de 1762 fue sitiado por los ingleses en la batalla del Río San Juan de Nicaragua y se salvó la fortaleza por la valentía de Rafaela Herrera, hija de don Pedro Herrera comandante del fuerte, quien acababa de morir cuando venían los piratas.
Ya solo nos queda dejar algunos tips:
- Los cortes de luz son habituales, asegúrate que tu alojamiento tenga un generador.
- Reserva la panga con tiempo para irte, normalmente la gente del alojamiento te ayudara con eso.
- Bordee Café, junto hotel Victoria, súper rico para comer y cenar, súper atentos los chicos, espaguetis con tomate súper ricos.
- Justo delante la cancha de baloncesto, una casa azul y amarilla, la del letrero del «Hotel Richardson», lavan y secan la ropa, pregunta a la señora (Beti), una bolsa de ropa 50 córdobas.
- Comedor las orquídeas, pescado con salsa de ajo riquísimo, 200 córdobas por pescado.
- Minisoda Juanita, frente al parque de baloncesto, rosquillas 5 córdobas , picos 10 córdobas , zumo 25 córdobas, rico y barato.
- Alquiler de catiuscas en Nenas Lodge, 1 $ el día. Las necesitaras para trekking o el tour a caballo.
Y algunas fotos para animaros. 🙂
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